“A tu libertad le falta antirracismo”
El 1 de noviembre de 2025, el colectivo afro LGBTIQNB+ irrumpió en la Marcha del Orgullo Gay con un camión propio, exigiendo visibilidad y ljusticia. La modificación de la fecha unificó las luchas, dejando claro: “A tu libertad le falta antirracismo”. Fue un grito frente a un gobierno que desmanteló derechos y borró la presencia afro en el país.
por Melina Schweizer
La Ciudad Autónoma de Buenos Aires se llenó de colores, ritmos y orgullo en la Marcha del Orgullo LGBTIQ+ del 1 de noviembre, pero con una diferencia clave: por segunda vez consecutiva, la comunidad afro LGBTIQ+ participó con su propio camión, autogestionado por activistas y artistas del colectivo. Esta decisión marcó un hito en la visibilidad de las identidades afro dentro de la marcha y reflejó la necesidad de crear espacios propios en un contexto político, social y económico donde las luchas históricas siguen siendo silenciadas.

El cambio de fecha fue impulsado por organizaciones afroargentinas que propusieron unificar las conmemoraciones para no tener que elegir entre el Día Nacional de los Afroargentinos/as y la Marcha del Orgullo LGBTIQ+. La Comisión Organizadora aceptó el pedido, entendiendo que para las comunidades afro LGBTIQ+ el desafío no era solo participar, sino también alzar la voz frente a un gobierno que borra su presencia de las agendas públicas. Así, la jornada —instituida por la Ley 26.852 en homenaje a María Remedios del Valle— reafirmó su sentido histórico al confluir con la lucha por la diversidad sexual y de género. Bajo el lema “Frente al odio y la violencia: más orgullo y unidad”, ambos movimientos se encontraron en un mismo reclamo: resistir la exclusión y defender la memoria.

“En nombre de la libertad, se están aplicando políticas que nos excluyen y nos dejan sin espacio para celebrar ni protestar”, explicaron desde el Colectivo Afros LGBTIQ+. “Por eso pedimos unificar las fechas: porque la libertad que nos ofrecen no alcanza, porque todavía hay una parte del país que prefiere no vernos. Queremos estar en la calle, visibles, presentes, con nuestros cuerpos negros y disidentes, recordando que sin antirracismo no hay orgullo posible.”
OEl camión de la comunidad afro LGBTIQ+: un acto de resistencia
El camión fue un espacio de celebración, pero también de visibilidad. «Este es un espacio para los que somos visibles, pero muchas veces aún no somos escuchados», decía Sista V, DJ afroargentina y una de las impulsoras del camión de la comunidad afro LGBTIQ+ en la marcha. «Es nuestra forma de ocupar la calle, de decir que existimos, que resistimos y que merecemos ser reconocidos. Este camión es nuestra casa, nuestra voz», añadió Carlos Álvarez, activista antirracista e integrante de Xangó, organización que lucha contra el racismo y la xenofobia. «Es una forma de enfrentarnos al racismo estructural y a la discriminación, de exigir que se nos vea como parte fundamental del movimiento LGBTIQ+. No solo pedimos que nos respeten, pedimos que nos dejen ser», agregó Álvarez, mientras la música del camión contagiaba el ambiente de un espíritu de lucha y resistencia.

La comunidad gay negra y el rechazo al racismo
La consigna “A tu libertad le falta antirracismo” se convirtió en el grito de resistencia frente a las políticas neoliberales que pretenden excluir a las personas afro, y especialmente a las personas trans, travestis y no binarias.
«Este lema refleja nuestra lucha contra un sistema que nos excluye, que se dice defensor de la libertad pero nos niega la nuestra. La libertad sin antirracismo no es libertad, es opresión», comentó Sista V, una de las impulsoras del camión autogestionado del colectivo afro LGBTIQ+ en la marcha. «Es muy doloroso ver cómo el discurso de libertad se usa para justificar el desmantelamiento de políticas públicas que nos han costado años de lucha. Nos están borrando», agregó, con voz firme.

Este mensaje se conectaba directamente con la realidad del gobierno de Javier Milei, que, desde su llegada al poder en 2023, ha tomado decisiones que recortan las políticas públicas de inclusión para las comunidades afro y LGBTIQ+. La eliminación del INADI, la disolución del Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad y la derogación de la Ley 26.160 que protegía los territorios indígenas son solo algunas de las medidas que impactaron negativamente a las comunidades históricamente vulneradas. Las y los activistas afro LGBTIQ+ no dudaron en señalar que, mientras se habla de libertad y justicia, el gobierno lleva adelante un recorte de derechos que directamente afecta a sus comunidades, sumergiéndolas aún más en la invisibilidad.
“Mientras nos dicen que vivamos en libertad, el gobierno nos está eliminando como parte de la agenda política. No hay libertad para nosotros si nuestros derechos siguen siendo recortados. Este es un país que se está olvidando de lo que nos ha costado llegar hasta aquí”, afirmó Carlos Álvarez, activista de Xangó. «Es urgente que la gente entienda que sin antirracismo no puede haber una verdadera libertad. No es solo una consigna, es una exigencia, una lucha por la dignidad.»
La presencia afro en la marcha no solo marcaba un reclamo por la reparación histórica, sino también por el derecho a existir plenamente en el espacio público, sin miedo a ser perseguidos o ignorados por el sistema.
La lucha por los derechos LGBTIQ+ y afrodescendientes está lejos de ser nueva en la historia de Argentina. De hecho, la primera Marcha del Orgullo de Buenos Aires, que tuvo lugar en 1992, fue un espacio donde las identidades sexuales diversas comenzaron a romper con las normas del sistema cisheteronormativo. Sin embargo, dentro de ese espacio, las personas afro LGBTIQ+ han sido históricamente invisibilizadas. La marcha, que en sus primeros años fue un espacio de reivindicación por la libertad sexual, también ha servido como plataforma de denuncia por el racismo, la xenofobia y la exclusión.
