
PLAZAPALOOZA: festival por una plaza para el Microcentro
Este sábado 4 de octubre, a partir de las 15:00, la organización civil Basta de Demoler (@bastadedemoler) convoca a PLAZAPALOOZA en la esquina de Av. Córdoba y Reconquista. No es un festival más: es una acción pública que reclama la creación de una plaza en el microcentro porteño, en el terreno contiguo al monasterio colonial de Santa Catalina, y que busca consolidar un proyecto vecinal que combina espacio verde, memoria y protección del patrimonio arqueológico.
Un terreno con historia y restricciones
El lote en cuestión bordea el Monasterio de Santa Catalina, erigido en 1745, que forma parte del patrimonio histórico nacional y fue testigo, entre otros episodios, del bautismo de fuego del Regimiento de Patricios durante la invasión inglesa de 1807. Históricamente, allí estaba la huerta del convento y un cementerio. Por su naturaleza, el predio exige una intervención con estudios arqueológicos previos: la Ley Nacional de Arqueología y Paleontología establece la obligación de registrar y proteger yacimientos que puedan aparecer con cualquier obra.
El lote en cuestión forma parte del entorno inmediato de un Monumento Histórico Nacional, que requiere para su conservación condiciones de asoleamiento y, además, se integra al Área de Protección Histórica del centro porteño, que limita las alturas edificables. Estos factores hacen que cualquier proyecto de construcción deba evaluarse con riguroso respeto por la normativa patrimonial y arqueológica.
Un conflicto abierto: torres vs. plaza pública
Pese a que la Justicia ya anuló permisos previos para erigir torres en ese predio, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA) impulsa actualmente un estudio de prefactibilidad para un proyecto que contemplaría una torre con varios subsuelos y una plaza de carácter privado. Esta iniciativa implicaría no solo la pérdida de un espacio de uso común, sino la transformación y potencial destrucción de restos históricos y del antiguo cementerio.
Como contraparte, vecinos, vecinas y organizaciones civiles impulsan la iniciativa de plaza pública. La propuesta comunitaria plantea convertir el terreno en una plaza de aproximadamente 6.500 m² de espacio verde público. Esa intervención, más allá del valor evocativo de restituir la huerta y el cementerio del monasterio, responde a necesidades urbanas actuales: amortiguar la isla de calor que sufre el microcentro, aumentar áreas de esparcimiento para los residentes que se reintegran o se mudan al barrio y mejorar las condiciones ambientales y patrimoniales de la zona.
Dimensión ambiental y social
Una plaza de 6.500 m² en el corazón del microcentro tendrá efectos concretos, como el aporte de sombra, mitigación de temperaturas extremas, mejora en la calidad del aire y espacios para la sociabilidad. En un contexto de calentamiento global, la creación de áreas verdes públicas en el centro de la ciudad se presenta como una estrategia de adaptación y de equidad: el microcentro dejó de ser únicamente un distrito de oficinas y recupera población residente que necesita servicios y espacios públicos.
Además, la propuesta incluye la realización de excavaciones arqueológicas previas, con vistas a preservar y revalorizar los restos del cementerio y cualquier vestigio vinculable a la historia colonial. Una plaza así permitiría conjugar uso público, conservación del patrimonio y educación ciudadana sobre las capas históricas de la ciudad.
La pulseada judicial y política
Basta de Demoler ha recurrido nuevamente a la vía judicial para frenar cualquier emprendimiento que ponga en riesgo la memoria y el patrimonio del lugar. La organización sostiene que la ciudad «no necesita más torres: necesita más historia viva y espacio público», y convoca a la ciudadanía a acompañar esta iniciativa.
En paralelo, hay proyectos de ley impulsados por vecinos y legisladores que buscan declarar el predio como espacio destinado a plaza pública. La combinación de acción legislativa, judicial y de movilización barrial es clave; tanto respecto al dictamen del estudio de prefactibilidad iniciado por la administración porteña, como también en las resoluciones administrativas sobre categoría de uso y la posible aparición de vestigios arqueológicos, que marcarán la dirección final del conflicto.
PLAZAPALOOZA como espacio de visibilización
El festival convocado por Basta de Demoler funciona como punto de encuentro para mostrar el proyecto, informar sobre la historia del lugar, difundir los resultados de relevamientos y exigir transparencia en los procesos administrativos. Es también una oportunidad para que los vecinos escuchen a arqueólogos, historiadores y especialistas en urbanismo y ambiente, y para visibilizar el valor patrimonial y urbano del predio.
La cuestión plantea una discusión de fondo sobre la ciudad que se quiere: ¿seguir priorizando desarrollos inmobiliarios que aumentan la densidad y privatizan el espacio público, o privilegiar la conservación del patrimonio y la ampliación de áreas verdes accesibles para todos?
La cita: sábado 4 de octubre, 15:00, Av. Córdoba y Reconquista. Llevar ganas de informarse, participar y exigir que el centro conserve su memoria y gane su plaza.
Foto: Maqueta de Basta de demoler