Escuela Feminista de Pintura

Se recrea por primera vez en Buenos Aires la “Escuela Feminista de Pintura”; instalación, obra site-specific y espacio activo al mismo tiempo, en la que Ad Minoliti intenta modificar el modo en que se enseña la teoría y la práctica artística, tanto desde el diseño del espacio como desde el contenido de sus clases.
Transformando las salas del Museo Moderno en un aula vestida con formas geométricas de colores vibrantes, Minoliti crea un espacio donde activistas, académicxs y artistas ofrecen clases para visitantes de todas las edades con el objetivo de revisar los géneros tradicionales de la pintura. Siempre desde una mirada disidente, la “Escuela…” se propone cuestionar la tradición de las artes, el predominio de lo masculino por sobre lo femenino y las narrativas hegemónicas de la historia del arte.

El sábado 1 de febrero, en el 2º piso del Museo de Arte Moderno se presentó: Tenshi «La capucha de medusa». Un taller que tuvo como objetivo reflexionar sobre la idea de los femenino como monstruoso y el peligro de las emociones que se vinculan a las venganzas femeninas o de personas abusadas. Uno de los tantos aspectos de lo monstruoso es la ira, emoción que tanto en las ficciones antiguas como en las modernas se presenta como un desborde irracional. La ira, producto de abusos es robada y utilizada para fabricar historias de amedrentamiento y sumisión.
Se repasaron las historias de personajes mitológicos como Medusa y Némesis y relatos más actuales como Kill Bill o Audition , que derivó en un taller de escritura creativa donde a través de distintas consignas se dio una primera forma escrita al monstruo, monstrua o monstrue sobre el que se trabajará en la clase práctica de pintura: «Draguear el relato», que se desarrollará el 8 de febrero bajo la conducción de Llia Llunez, para indagar sobre el género del retrato pictórico desde la teoría queer y la experiencialidad drag en torno al uso contraproductivo de los materiales, utilizando insumos cosméticos y disputando los estándares canónicos materiales del arte; a la vez que permitiendo revisar críticamente las nociones asociadas a los universos del maquillaje, lo femenino y las artes menores, en un cruce entre plástica, cosmética y drag.

El sábado 15 de febrero, con «Limpieza de bodegón», Lucia Reissig explorará sobre las siguientes preguntas: ¿Qué se puede hacer dentro de lo no reconocido? ¿Podremos percibir la invisibilidad como un territorio a explorar? ¿Qué es el valor y quién define el valor de nuestras tareas? ¿Qué es hacer nada? ¿Puede el trabajo estar ligado al placer? Desde dónde se narra lo cotidiano? Desde qué lugar fue pintada la historia? Qué otras formas tiene la pintura, se puede pintar sin pintura? Quien le preparaba la comida al gran pintor, quien criaba a sus hijxs?

«Pintura de género», es el taller que el sábado 22 de febrero 2020, estará a cargo de Fátima Pecci Carou. El  “petit genre, costumbrista o cuadro de costumbres” es una escuela pictórica que busca representar escenas de la vida cotidiana al retratar personajes anónimos en situaciones mundanas, ya sea al aire libre o en un interior. Se distingue de las pinturas de historia (también llamadas gran género) y los retratos. Este taller propone un recorrido visual de este tipo de género por distintas épocas de la historia del arte, donde cada participante creará una pintura propia, representándose en alguna situación cotidiana: preparándose para una marcha feminista, conversando con amigues o simplemente durmiendo la siesta.

 ¿De qué están hechos los cuerpos mal hechos?: un archivo político de lenguajes, técnicas y representaciones de la gordura, es taller que cierra esta experiencia el sábado 29 de febrero. Laura Contrera, a cargo del mismo, relata:  Vamos a compartir un archivo político de sentimientos, lenguajes, técnicas y representaciones de la gordura, usando como excusa el género anatomía/desnudos. Se trata de un archivo inicial, precario y frágil, construido en torno a la pregunta por los cuerpos leídos como malogrados, fallados o abyectos y las acusaciones patologizantes que los acechan discursiva y materialmente. La idea es trazar una genealogía imprecisa del cuerpo impropio que ponga en crisis el supuesto de que estaba bien visto ser gorde en algún momento histórico de Occidente designado vagamente como “la antigüedad”, discutiendo el dispositivo del “antes y después” que captura la gordura. El archivo y su análisis son incompletos, pues no alcanza a dar cuenta de la totalidad de experiencias que iluminan un mapa federal, regional e incluso más amplio, con sus cruces transfronterizos, sus migraciones y traducciones traidoras. Exploremos el volumen y las grafías en clave punk, usando las técnicas del collage y el fanzine para construir un nuevo archivo en torno a la pregunta inicial: ¿de qué están hechos (y cómo representamos a) los cuerpos mal hechos?

Las actividades son libres y gratuitas.
Sábados a las 17:00 en la sala del 2° piso del Museo.

Museo de Arte Moderno  de Av. San Juan 350 en el barrio San Telmo. 

 

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