La larga marcha villera
Al ritmo de cumbias o al compás del bombo, ataviados con coloridos trajes bolivianos o con sencillas remeras, portando pancartas, banderas o wiphalas, se desarrolló en la tarde de ayer, una nueva y larga marcha de vecinos residentes en las villas de la Ciudad. El reclamo es siempre el mismo: que el Gobierno porteño cumpla con las leyes de urbanización de sus barrios.
Bajo la consigna “Macri: exigimos nuestro derecho a vivir en la Ciudad”, los manifestantes se movilizaron desde el Obelisco hasta la jefatura del Gobierno porteño, donde denunciaron que: mientras la actual gestión de Gobierno incumple las leyes que impulsan la construcción de viviendas sociales, estimula el creciente negocio inmobiliario en Ciudad. “Un negocio que prioriza el lucro sobre las necesidades concretas: urbanizar las villas, construir viviendas dignas, instalar agua potable, cloacas, electricidad, escuelas y hospitales en los barrios”, sostienen los vecinos.
“La ciudad de Buenos Aires vive una situación de emergencia habitacional por la falta estructural de viviendas”, apunta el documento consensuado entre todos los referentes barriales. En el texto señalan que el jefe de Gobierno porteño incumple las normativas que prevén la construcción de viviendas sociales, como las leyes N° 148, 341, 1770, 1333, 3343 y exigen un plan integral de viviendas. También solicitan que se ponga fin a los desalojos compulsivos y a la criminalización de los luchadores sociales.
La necesidad de vivienda en la Ciudad afecta a millones de personas
Cristian Heredia, referente de la Villa 21-24, manifestó que “la disminución del presupuesto destinado a la vivienda y la subejecución de los programas existentes, son el ejemplo de las prioridades de la política macrista que favorece a las corporaciones y al mercado inmobiliario, con una ausencia total de políticas públicas para los sectores populares”.
Mónica Rueca, referente de los Piletones, sostuvo que “la necesidad de vivienda en la Ciudad afecta a millones de personas, porque los alquileres son cada vez más altos y miles de familias viven hacinadas por la imposibilidad de resolver la situación habitacional, al mismo tiempo que existen más de 100.000 viviendas ociosas”.
“Las tomas y ocupaciones de tierra son consecuencia de la falta de viviendas y de políticas para garantizar el acceso a la misma”, agregó Rueca, frente a la jefatura de Gobierno porteña.
“Macri no seas careta, urbanizá la Zabaleta”.
Estela, referente de la Villa Zabaleta, denunció que “el único accionar del gobierno de Macri en relación a la vivienda es una agresiva política de desalojos, generalmente acompañada por represión, que lleva a la expulsión del pueblo trabajador de la Ciudad”, y agregó: “estamos cansados de que la respuesta del Gobierno de Macri a los graves problemas de nuestro pueblo sea la indiferencia”.
Por una Ciudad más justa
Alejandro Salvatierra, el referente de la villa 15 -Ciudad Oculta- cerró el acto exhortando a todos los habitantes de la ciudad de Buenos Aires a solidarizarse con la problemática de la vivienda porque «una ciudad urbanizada, no es un beneficio solo para el villero, sino un lugar mejor para que todoslos porteños podamos vivir ”.
“Si no hay villas, tendremos una Ciudad más justa y más igualitaria, por eso apelamos al resto de la sociedad porteña para que acompañe el reclamo de la urbanización de las villas”, dijo Salvatierra.
Desalojo latente
La Cámara Penal y Contravencional porteña ratificó ayer la orden de desalojo de las familias que habitan el barrio «Papa Francisco», en los terrenos ocupados desde el 25 de febrero pasado en Villa Lugano. El tribunal señaló que «el procedimiento deberá ser ejecutado por la Policía Metropolitana» con el apoyo de la Policía Federal Argentina y de la Gendarmería Nacional. El expediente regresó al juzgado de origen, a cargo de la jueza Gabriela López Iñíguez, que deberá fijar la fecha del operativo. En tanto que en la Legislatura de la Ciudad, 30 diputados de la oposición rubricaron una misiva donde solicitan a la magistrada, «no adoptar medidas que impliquen salidas no consensuadas o violentas’. Y enfatizan: ‘No corresponde un desalojo policial compulsivo mientras la Legislatura está debatiendo proyectos para formar una mesa de diálogo y buscar una solución al reclamo de vivienda’.
Fotos: Corriente Villera Independiente /Agencia Télam