Va a estar caro Buenos Aires

Por Mario Bellocchio*
para la Red Medios Barriales

La concreción de la “amenaza” llegó de la mano de las facturas –grises con vivos verdes– de Rentas que, bajo el anuncio de un promedio de aumento del 66% y, ante el conocimiento de numerosos casos cuya exorbitancia es descomunal, da a suponer que para promediar esa escueta cifra hay vecinos que deberían recibir subsidios en lugar de pagar un impuesto.

Todas las crípticas –para la mayoría de los contribuyentes– explicaciones que se pretenden dar no contienen una línea del porqué se estableció como piso el importe de seiscientos pesos anuales, una decisión trascendental que reúne a las víctimas de la “confiscante” medida en el núcleo de los hogares más humildes.

Basta con recorrer los testimonios de las publicaciones, que incluyen aquellas habitualmente afines al Gobierno de la Ciudad, para encontrarse con todo tipo de ejemplos que desdicen la pregonada modestia del 66%.

En Boedo una casa construida en 1950, de 130 m2, pasó de $643.- anuales a $ 1143.-, casi el doble. Tener un importe anterior superior al fijado arbitrariamente como piso la puso a salvo de un porcentual de mayor dimensión.

En cambio, un departamento en Caballito de tres ambientes se fue de $99,70 anuales a $600.- 500% de aumento. La mitad de los 1.770.000 contribuyentes, que pagaban por debajo del piso de $600.- anuales se encuentran en situaciones iguales o peores que la descripta.

Una casa PH de Pompeya de 160 metros cubiertos, de 82 años de antigüedad, que pagaba anualmente $ 160.-, ahora abona $ 647.-, (304% de aumento)

Los aumentos porcentuales rozan algunos casos verdaderamente escandalosos: Cristina Fins, vicepresidente de la Asociación de Vecinos La Boca, que vive rodeada por el Riachuelo, en un rincón olvidado de la Capital, declara: Yo pagaba 36 pesos anuales y ahora pagaré 600: es una suba del 1567%. Reconozco que lo que pagaba antes era poco y no digo que el impuesto en sí sea mucho. Pero es mucho el aumento de un día para otro. En la AGIP, sin ruborizarse, le informaron que pertenece a un núcleo de viviendas humildes que estaban más atrasadas impositivamente y por ello son las más castigadas por el alza.

Nuestro colega Alfredo Roberti (Revista “La Urdimbre”) manifiesta: En mi caso era sólo $ 12,16 por bimestre. Ahora subió a $ 100 por bimestre (en realidad $ 50 x mes). Si bien Catalinas Sur está nominalmente en La Boca es un complejo de edificios de clase media, aunque también viven muchos jubilados que cobran la mínima. Mis vecinos recibieron aumentos proporcionales. Tal vez estén actualizando las valuaciones fiscales sobre las que aplican los aumentos…, tengo que ver qué pasa en sectores más pobres de La Boca. Otra anormalidad es que los aumentos son retroactivos al 1° de enero, algo –creo– nunca visto antes.

A las cocheras y bauleras también les llegó el manotazo estableciéndose para ellas un monto mínimo de $200.- anuales. Un vecino de Almagro comenta su sorpresa: Recibí hoy el ABL. Me resultó insólito que por la baulera, un rectángulo insignificante por el que pagaba $ 15,02 anuales, ahora tendré que pagar $ 200. (1231% de aumento).

La factura viene acompañada por un didáctico y colorido folleto que nos indica “cómo leer la nueva boleta”, pretendiendo una direccionalidad catastro-financiera a la elemental mirada del contribuyente desviándola del fatídico recuadro donde figura el importe. El anuncio titular del folleto es: “Nuevo sistema tributario más equitativo y más justo”. La pregunta que surge de inmediato es ¿qué noción tiene Macri sobre la equidad y la justicia?

El informe circula sobre terminología como VFH (valuación fiscal homogénea), USC (unidad de sustentabilidad contributiva), el TTA (tributo total anual) y estimula la consulta si su VHF supera el 20% del VRM (valor real del mercado), si el MAT (monto anual del tributo) supera el 1% del VRM.

Igualmente, si usted figura entre los miles de perjudicados que superan holgadamente la promesa de promediar el 66% de aumento, debe recurrir al RMPC (recordar a Macri en los próximos comicios) y tener en cuenta que cuando las explicaciones y justificaciones de estos “despojos públicos” sólo son comprensibles para los burócratas de turno lo más seguro es que estemos asistiendo a otra intervención de la MBC (mano en el bolsillo del contribuyente).

*Director del Periódico Desde Boedo

———————————————————————

Notas Relacionadas

Se viene el tarifazo en la Ciudad

Hay presupuesto 2012 y con aumento de ABL

Regalo de Navidad: ¿Aumentan los impuestos en la Ciudad?

La Inclinación de los Platillos

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *